DIOSODADES

Pienso en esos amigos más vulnerables _ aunque siempre hay sorpresas- Y ¡La Providencia existe! Hoy, nada más salir del ascensor, empujando un carrito, y toda enfundada y hasta con máscara-fular, había un chico esperando delante del portal con su mascaril la puesta. Entonces al abrir la puerta del portal ¡le he conocido! Y ¡Él a mí! Iba al Igualatorio Médico, a por sus recetas. Y se lo he dicho llamádole por su nombre, al que fue mi mejor profesor de piano "No tengo tu teléfono; Pero he estado pensando en ti, pienso en ti Señor X." ¡Y es que era verdad! ¿Cuántas probabilidades había de haberme encontrado con él dadas las circunstancias? Yo os lo diré. ¡Muy pocas! Una entre ¿13.000?